Foto portada: EarthRights International / Fotos galería: PerúEquidad

  • La presentación del informe: “Repsol: Una catástrofe que se pudo evitar. Impactos del derrame de petróleo en el mar peruano y en los derechos de la población en Ventanilla” se realizó el 12 de septiembre en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
  • El informe fue realizado en conjunto por EarthRights International (ERI), CooperAcción y Perú Equidad, con apoyo de la Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH).
  • La empresa española Repsol vertió aproximadamente 11,900  barriles de petróleo en la costa marítima del Perú en enero del 2022. Más de un año y medio después, ni la empresa ni el Estado peruano  han tomado responsabilidad ante lo ocurrido.
  • El derrame no solo afectó al ecosistema marítimo, sino también a la forma de subsistencia de cientos de familias que realizaban la pesca como actividad de sustento en el día a día. 

Lima 15 de setiembre de 2023.- El derrame de petróleo ha tenido funestas consecuencias medioambientales y humanas, y los pescadores Ancón, Ventanilla, Chancay continúan afectados de manera económica, salubre y psicológica a día de hoy. Así lo dieron a conocer sus representantes en la presentación del informe : “Repsol: Una catástrofe que se pudo evitar. Impactos del derrame de petróleo en el mar peruano y en los derechos de la población en Ventanilla” realizada el pasado 12 de septiembre en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

La investigación ofrece una recopilación estructurada de información acerca de los principales efectos en los derechos humanos de la comunidad afectada, basándose en los testimonios de dicha población. De igual manera, también analiza la responsabilidad tanto de la empresa Repsol como del gobierno peruano, e incluso del Estado español, en relación con estas transgresiones. 

En la presentación del informe participaron  Itzel Silva, Coordinadora del Área legal del Programa de la Amazonía de EarthRights International; Enrique Fernández-Maldonado Mujica, coordinador del Programa Empresas y Derechos Humanos en  Perú Equidad y Alejandro Chirinos, director de CooperAcción y Jimena Reyes de la Federación Internacional por los Derechos Humanos – FIDH.

Se incidió en la responsabilidad que tiene el estado peruano ante el derrame, debido a irregularidades en el funcionamiento de la refinería La Pampilla, donde se descargarían los barriles vertidos en el mar. De igual manera, expresó la gran responsabilidad que tiene Repsol en lo ocurrido. 

Por otro lado, también se habló sobre la responsabilidad que tiene el Estado español en lo ocurrido de acuerdo a la legislatura internacional, ya que es inversor de la empresa Repsol. 

En la presentación se contó con los testimonios de representantes de asociaciones de pescadores. Abelino Ramírez, representando a la Asociación de Pescadores Artesanales de Ancón, habló sobre la responsabilidad del Estado: “Es lamentable la indiferencia de nuestras autoridades centrales que poco o nada han hecho en apoyarnos desde un primer momento… (el gobierno) no se tomó el tiempo de fiscalizar a esta trasnacional, y ahora Repsol menciona que no tienen culpa en esto”.

Mercedes Pando, pescadora de ASPEFAEA y afectada en la zona de Ventanilla expresó las dificultades que tuvieron que enfrentar las familias de los pescadores debido a que no tenían manera de sustentar su alimentación. “Hemos tratado de sobresalir, pero no es suficiente. Esta lucha sigue y continuará, hay muchas personas que necesitan el apoyo, ya no solo en Ventanilla y Ancón, porque ya se extendió a más. Esto nos causa mucha tristeza”. 

Miguel Núñez, presidente de ASPEFAEA, declaró acerca de cómo los pescadores vivieron el derrame, y cómo trataron de manifestarse en contra del mismo “Ahora somos cinco distritos, pero este derrame va a afectar a todo el litoral, a todo el mar de Grau” manifiestó. 

Fanny Tamayo, presidenta de la Asociación de Armadoras y Emprendedoras del puerto de Chancay, manifestó la necesidad que tienen de continuar con la lucha, e hizo hincapié en la manera en la que les afectó salubremente el derrame: “En Chancay vivimos de la pesca. Hay niños que se han enfermado, madres que también han estado delicadas, y todavía Repsol venía a verificar si era cierto o no”.

Finalmente se presentaron las conclusiones y recomendaciones del informe a cargo de Alejandro Chirinos, director de CooperAcción. El informe reconoce a Repsol como principal responsable del ecocidio, e incita al Estado peruano a abrir espacios de diálogo con los pescadores afectados, para que reconozcan sus necesidades y puedan brindarles el soporte necesario para que logren volver a su trabajo pronto.